¿Alguna vez has tenido una pregunta tan difícil que ni siquiera la has dicho en voz alta? ¿O una duda tan grande que no has sentido que pudieras compartirla, especialmente en la iglesia? Preguntas como: “Dios, ¿por qué?”, “Dios, si me amas, ¿por qué permitiste…?”, “Dios, ¿dónde estabas cuando…?”, “Dios, ¿por qué estoy pasando por…?”. A veces pasamos por períodos en los que cuestionamos a Dios. Únete a nosotros en esta serie mientras exploramos el tema del sufrimiento y avanzamos un paso más en nuestra comprensión de dónde está Dios cuando la vida no tiene sentido.
Un clásico inspirador de más de treinta años, ¿ Dónde está Dios cuando duele ? explora honestamente el dolor, desde las heridas físicas hasta el dolor emocional y espiritual, y arroja nueva luz sobre la presencia de Dios en nuestro sufrimiento.
“¿Cómo puede un Dios amoroso permitir que esto suceda? Dios es o todo amor o todo poder, pero no puede ser ambas cosas a la vez”.
Seguramente habrás escuchado esa pregunta y quizás incluso te la hayas hecho tú mismo. Cuando muere un ser querido, recibimos un diagnóstico terminal o se producen desastres naturales, la gente suele preguntarse si Dios es la “causa” del sufrimiento y por qué no elimina de inmediato el dolor o soluciona la situación. Como resultado, nos enojamos con el Dios que una vez fue amado y que nos traicionó.